

Lamentablemente no elegí un buen día. Habia mucha gente, asados y chelas por doquier. Estuve unas tres horas más o menos. Salieron varias truchitas, pequeñas casi todas. Lo mejor fué un par de farios de colores bien marcados y muy luchadoras.

El estero viene aún algo turbio (lechoso) y muy correntoso. Tiene pocos pozones, por lo que utilicé, ninfas lastradas bien bichosas (pelúas). La que mejor anduvo fue una Hare´s ear lanzada en derive libre hacia las cabezas de los pozónes.

En las correntadas pesque con emergente, a pesar de la fuerza de la corriente las truchitas salían magicamente (no sé de dónde) con mucha energía a tomar la mosca. Caché que eventualmente mejoraba el pique cuando, por decirlo de alguna manera, marcaba el lugar en que pondría la mosca con varios lances en los cuales la mosca sólo tocaba la superficie, unas tres veces y luego la dejaba a contra corriente undiendola, en la medida que bajaba la punta de la caña.
Shao shiquillosh...