Para no hacer tan larga la historia , fui uno de los ganadores ( aun que mi señora aun no me cree) , de un premio que consistía en una flotada en el Petrohué junto al master Patricio Rondini.
Hicimos contacto por correo y luego telefónicamente para concertar una fecha a contar de enero pero el bajo nivel de las aguas impedían que subiera una buena cantidad de chinooks , asi que la cosa se fue dilatando , pero viendo que seguramente ya no mejoraría y el próximo año podría ser peor decidimos meternos al rio el sábado 2 de abril recién pasado.
La llegada a Camanchaca quedó pactada a las 8:00 ya que antes no se puede entrar según las reglas de la administración debido a las prohibiciones que existen por parte de la autoridad en cuanto a poder habitar en esos lugares.
Después de un viaje de 1:10 hrs desde mi casa, 5 minutos antes de las 8:00 estaba en el portón. (era que no).
Después de un cordial saludo con Patricio nos subimos en su montero y partimos a la bajada de botes, que por alguna extrañeza estaba completamente desocupada y según Patricio era raro ya que el sábado anterior habían cerca de 20 botes en el tramo.
El aire estaba frio y algo nublado , además que una neblina sobre el agua hacía presagiar que la cosa se venía auspiciosa. Mientras cruzábamos el rio hacia unos sauces Patricio me explicaba la estructura del tramo, y las diferentes posibilidades que existen según la topografía y mientras tanto aprovechaba de ir adaptándome al equipo ya que hacia un par de años que no casteaba una caña #8 con un carrete 10/11 , cargado con una línea #9 con un torpedo cortísimo que según la etiqueta era una Rio para Bass. El lider también era bastante corto y la mosca lastradisima , así que la verdad me costó bastante la transición.
El rio la verdad estaba bastante bajo e incluso al subir por una corredera tocaba el fondo en las piedras lo que implicaba un esfuerzo adicional por parte del anfitrión.
Despues de unos intentos por ambos lados del rio subimos ( vamos arando dijo la mosca) a un pozón donde según el master se encontraban los dinosaurios , habían dos grupos de pescadores con herramientas que hasta el momento no habían pinchado nada.
Después de ubicar el bote en la posición ideal del pozón comenzamos a castear hacia la revesa y hacia la corriente alternadamente, siempre siguiendo las instrucciones del master. De a poco se fue la neblina y tímidamente empezó a salir el sol y a nublarse alternadamente. Era notorio como los saltos de los chinooks se hacían mas seguidos cuando se nublaba , y cuando el sol caía sobre el rio se ubicaban en el fondo. Cerca de las 11 ( esa hora no falla) , Patricio pincha uno en el pozón, la lucha fue descomunal, pero la experiencia y tranquilidad del pescador era impresionante, mientras lo trataba de acercar al bote sin que tome corriente me iba explicando como se debía trabajar y que errores no había que cometer para que no se arrancara hacia la corriente ya que ahí se pone difícil sacarlos ya que tienen una fuerza increíble.
Al cabo de varios minutos logramos ( aquí si colaboré) meterlo al chiquillo y sacarlo a la orilla para la cesión de fotos, después obviamente de vuelta al agua, el cálculo era sobre 25 kilos.

Bueno , volvimos al pozón en una posición un poco mas abajo y proseguimos la faena , a los poco minutos Pato pincha otro y me lo pasa para que lo saque, UUUUUUF!! , el primer problema para el aprendiz es que el maestro es zurdo , asi que el carrete estaba al revés o sea había que recoger en contra del reloj , lo que al principio me costó asimilar, obviamente la adrenalina no me hacia pensar mucho, el freno estaba muy muy pesado y a veces devolvía línea con la mano para no tratar de regularlo ya que podía embarrarla. Que les puedo decir antes había sacado Chinook de 14 kilos con fierro , pero este sobre 20 con mosca sin rebaba era otra cosa. Mi preocupación era no dejarlo que se meta a la corriente y nunca perder la tensión de la línea, pasaban los minutos y ya estaba bastante cansado y tiritaba como un canasto de guatitas. Tras varios intentos y por la inexperiencia del aprendiz logramos meterlo al chiguillo , vienen las fotos y la verdad que estaba tan cansado que casi no me lo podía .
Como comprenderán no entraba en mi cuero, ya podía morirme en paz.

Durante la tarde al subir la temperatura la actividad decayó , no por eso dejaron de saltar constantemente, incluso tuvimos la oportunidad de ver dos peleas entre Chinook por un lugar en el pozón , parecían dos cocodrilos peleando, algo que nunca había visto, impresionante.
Hay que consignar que ninguno de los demás botes logró pinchar ninguno , a pesar que les tiraron de todo. En esto Pato pudo reafirmar que teniendo los conocimientos necesarios de como pescarlos y del lugar donde se pesca , sin duda con mosca hay muchas posibilidades de tener éxito ( claro una cosa es escribirlo y otra hacerlo).
Tipo 16:00 hrs. Salimos del rio una por que ya no me podía el brazo y además que camanchaca a las 18:00 cierra el portón.
Solamente me queda agradecer públicamente a Patricio Rondini , un Master de la pesca de Chinooks , y por sobre todo una excelente persona , con una paciencia, generosidad y humildad enorme para enseñar lo que a él le ha costado años de práctica en el rio.
Resumen , una experiencia de utopía.