Estoy pescando en un paraíso, Cuba.
Ayer salimos tempranito en los botes planos, que son impulsados por palanca por los bravos guías de las Salinas, en el parque nacional de la Ciénaga de Zapata, en la Provincia de Matanza, Cuba. Dije bravos, porque la jornada de pesca son 8 horas, bajo un sol impresionante y ellos no utilizan motores, sin embargo llegamos a zonas bastante lejanas de lo que es el embarcadero.
Un poco de viento, pero sin miedo, a buscar nuestro precioso pez, el Macabí(o Bonefish).

Llegamos a las zonas bajas, ósea no más de 20 centímetros de agua, dejamos el bote y comenzamos a caminar, es importante no hacer ruido, nos movemos de manera lenta buscando ver el movimiento del agua o una cola de pez, a la distancia se ve un corre-corre de peces, el guía dice, ah.. es un barracuda, cambiemos la mosca y el líder, vamos a buscarlo en el bote.......yo pensé... bueno si es así, a prepararse para una buena pelea.... no fue un largo rato de espera, el guía me advierte de un pez a las doce y a unos 50 metros, el viento está en mi espalda, le logro ver, espero... cuando lo veo a unos 25 metros lanzo la mosca, es un popper, cae en al agua, espero.....hasta que muevo el popper y el pez vira, el corazón parece que quiere salir, me siento nervioso, peligra mi caza-pesca si no me controlo, se inicia un ataque salvaje, lo clavo, …. Lo vuelvo a clavar para asegurar la presa y comienza ese carrera impresionante para liberarse del anzuelo, que por cierto no tiene rebarba, a propósito se le deja sin esta parte importante del anzuelo, así el pescador y pez están en iguales condiciones de triunfo.
Ya llevo más de 20 minutos luchando para traerlo hacia el bote, en la primera carrera saco la línea flotante y casi todo el backing, cuando llego ese instante en la que ya tenía el carrete vacío prácticamente no hubo alternativa…..a caminar, cuando ya estaba cansado el pez…..digo, yo también, logre que se dejara traer hacia el bote….barracuda al fin, me subí al bote para que pudiera trabajarlo con más seguridad, resulto ser un bonito ejemplar de 20 libras.
Cambiamos de mosca y nos retiramos del lugar, llagamos a un bajo precioso, el viento había calmado, no hay nubes y el Macabí esta en todos los lugares, ya tengo la vara con la mosca preparada, en este caso estoy usando una Crazy Charly y la vara es una Sage 9 con línea 9, el carrete es Sage 6012R, el guía me indica un Macabí a las tres a 40 metros, tengo la línea en el fondo del bote, hago un lanzamiento y siento que estoy enredado, el pez sigue acercándose al bote, yo sigo enredado……, no le saco la vista al pez, y sigo enredándome…….ve el bote y ha, literalmente, puesto la primera en un Ferrari, y ha escapado como un bólido, la frustración y el verlo que se iba me dejaba enredado, ósea que la adrenalina me jugó una mala pasada….me neutralizo y pez más grande…………………se me había ido.
Segundo intento, ya más calmado, logro fijar la vista en uno de ellos que estaba tailing, comiendo, le lanzo la mosca………distancia, unos 25 metros, deposito la mosca en el agua y espero para moverla y llamar así su atención………no fue necesario, la vio y comenzó su movimiento hacia la mosca, ataca……muevo muy rápido la mosca y se la saco de la boca, espero… sigo moviéndola vuelve a atacar, la engancho, debo ser cauteloso y no tironear su boca, ya que es sensible y se la puede partir……..ya lo tengo, sale a una velocidad impresionante, le saque 3 carreras, una vez en mis manos, peso 4.5 libras, para que saliera sano y salvo de la batalla hube de caminar con el Macabí ayudándolo a oxigenarse, una vez que fue capaz de por sí solo volver a su ambiente natural fue un alivio y un sentimiento pacifico de haber cumplido con el principio de un mosquero, captura y suelta.
Es simplemente un privilegio poder pescar en estas aguas, país, gente….maravillosa.
Si alguien requiere de conocer de ante mano el cómo pescar en Cuba, escríbame y le responderé a la brevedad, juanmirandauk@hotmail.com
Buena pesca a todos.
Juan Miranda