Yo también pertenecí al mundo de la pesca con artillería (espinel, rápalas etc.), mataba y no me importaba cuan fuera el numero, solo pensaba en tener el bolso con peses, pero un día pescando en el rio Blanco en Curacautín, me encontré con un viejo pescador mosquero, y me contaba que en sus tiempos el sacaba truchones de hasta 6 kg en ese rio, yo para la poca educción que tenia respecto al tema lo elle vacan, pero el viejo me dijo “sabes amigo, disfrute y comí pescado como nunca pero eso hay solo queda en historias, ni los hijos ni mis nietos conocerán esos enormes peses, y es la ambición del hombre que convierte nuestras bellezas y parajes en un lugar sucio y nauseabundo, te imaginas lo que pescaran algún día tus hijos, esas truchitas paileras que llamas. Solo serán un cuento como el que yo te relato y desearas que ellos vean que existieron” me llego al corazón lo que dijo el viejo, y decidí cambiar. De primera me costo, a todos los peses los veía adentro del bolso, pero libere 65 un día y no me lleve ninguno. Yo sentía que me faltaba algo, y mi papa me compro una caña Rioby n°# 7 con una línea flautín, me enamore del deporte y de la lucha de esos peses que aunque de pequeño tamaño, son los que más entretienen….
Deje de ir a ese rio por 3 años y vino la crisis. Cuando volví este año, no lo podía creer, me encontré con el rio ya sin muchos peses, asustados y no picaban, casi no se veía actividad y estaba muy socio, lo vi dinamitar y poner redes, el rio lleno de pescadores y yo con una rabia que no puedo contener, el rio no volverá a ser lo que yo conocí, y hoy se ha convertido simplemente en una historia.
Conservemos nuestras especies y eduquemos a quienes no entienden que los peses son eternos, si los conservamos....
alludemos a alludar.